Hay quien dice que le gusta ir a hacer la compra físicamente porque prefieren ver y tocar lo que se llevan. Otros, abogan por la comodidad de recibirlo todo en su hogar sin tener que pisar el supermercado. Seas del team que seas, ambas cosas tienen sus ventajas y también sus inconvenientes. Yo lo tengo bastante claro: aunque las cosas que me van faltando en el día a día las compro físicamente, la mayoría de mi compra es compra online.
En mi caso concreto, encuentro muchas ventajas en esto, además de que me supone un importante ahorro de dinero. Hoy quiero contarte cuáles son mis motivos para apostar principalmente por esta fórmula y por qué es una idea estupenda si consigues adaptarte a ella.
En cualquier caso, te invito sobre todo a que aproveches lo mejor de cada opción y que tu modelo de compra sea fundamentalmente híbrido, ya que es lo que te va a ayudar a quedarte con lo bueno de la compra física y también de la compra online.
Estos son los motivos por los que he decidido hacer la compra online
Si me preguntas los cinco motivos por los que para mí la compra online es la opción que mejor se adapta a mis necesidades y estilo de vida, te diría los siguientes:
Gracias a la compra online puedo planificar mejor los menús
En general soy una persona bastante organizada y que me encanta crear listas, eventos en el calendario y demás técnicas de organización para el hogar. En el caso de los menús de comida suele ser también habitual, aunque algún lo cambie, pero en principio suelo tener una lista de las próximas comidas semanales y más o menos una idea en la cabeza de lo que voy a necesitar en un menú. Hago la compra online cada mes o mes y medio y las cosas que me van faltando las cojo en el día a día (frescos sobre todo, como frutas u hortalizas que no permiten que lo compres con tanta antelación).
Así, los ingredientes principales de las recetas que quiero preparar en el mes ya los tengo en casa y puedo adaptar mi menú mejor. Carnes o pescados, por ejemplo, los puedes congelar para que te duren más tiempo y solo tengas que sacarlo cuando mejor te venga.
La compra online se adapta a mis horarios
Otra ventaja de esta fórmula es que yo decido cuándo hacer la compra y también decido cuándo programar la entrega. Así, puedo hacerla a las diez de la noche, por ejemplo, y pedir que me la entreguen justo en el hueco que tenga libre, y de este modo la compra se adapta a mis horarios en lugar de hacerlo al revés.
Es cierto que hoy en día los supermercados tienen horarios bastante amplios, pero gracias a esto se ahorra mucho tiempo. Y esto también me parece bastante importante.
No cargo peso
Una compra semanal o mensual conlleva un alto volumen de productos y un peso muy difícil de manejar. Leche, fruta, carne, conservas… Todo va sumando y al final la realidad es que te puedes presentar en casa con una barbaridad de kilos que puede ser complicado de gestionar.
Con la compra online te evitas cargar peso, ya que te lo llevan hasta la puerta de tu casa (incluso algunos te ofrecen meterlo hasta la cocina). En este punto, me gustaría reivindicar que no hagas a los demás lo que no te gustaría que te hicieran a ti. En mi caso, en mi domicilio actual probé diferentes supermercados (Mercadona, Alcampo, Dia, Carrefour…) para decidir cuál se iba a convertir en mi supermercado de confianza para hacer la compra online y escogí aquel que vi que suponía menor esfuerzo para los trabajadores, que en este caso fue Mercadona ya que van con un carro que les facilita muchísimo la tarea y así ellos tampoco tienen que cargar con todo el peso.
Puedes comprar en lugares que no estén cerca de casa
Seguro que muchas veces te ha pasado que te gustan los productos de un lugar concreto, pero no vas tanto como te gustaría porque no te coge a mano. Con el reparto a domicilio puedes abrir el abanico y tener a tu disposición muchos más supermercados. Eso sí, no te recomiendo que compres poca cantidad de comida en cada sitio, porque la mayoría de las veces tienes unos gastos de envío a los que hacer frente (por ejemplo, aquí te cuento cuáles son los gastos de envío de Mercadona y aquí los gastos de envío de Carrefour, por poner un par de ejemplos). Si centralizas toda tu compra en un único supermercado te puede salir mucho más económico (o incluso ahorrártelos si llegas a un consumo mínimo en determinados supermercados).
Y, sobre todo, con la compra online siento que ahorro mucho dinero
A mí me parece la fórmula ideal para la compra grande, ya que ayuda a ahorrar dinero. ¿Cómo lo hace en mi caso? Además de lo ya mencionado de que me permite planificar mejor los menús y así no comprar de más o de menos, también me sirve de mucha ayuda que en todo momento puedo ver el importe total y, de esta forma, sé si me estoy pasando mucho y volver a revisar por si quiero sacar algo. En el caso de la compra en el supermercado físico no puedes ver lo que llevas hasta que no llegues a la caja.
También creo que se compra menos por impulso en el supermercado, precisamente porque puedes repasarlo bien y con calma, puedes mirar en casa si ya tienes ese producto (la eterna duda cuando estás en el lineal de los supermercados) o incluso aprovechar mejor las ofertas y promociones porque se ve con mucha más claridad cómo aplicarlas.
En definitiva, este es mi caso, mi experiencia, y estos son mis motivos para comprar online principalmente y combinarlo con pequeñas compras un par de veces a la semana con los frescos que voy necesitando o los productos que se me van gastando. Al final, lo más importante es que encuentres el método que mejor te funciona a ti.
