Todos tenemos más o menos interiorizado que el colchón hay que cambiarlo cada diez años. Podemos aguantar un poquito más o tener la necesidad de cambiarlo un poquito antes en función de la calidad del modelo que hayamos elegido. Con las almohadas sucede algo similar, solo que, en este caso, el plazo se recorta considerablemente. ¿Podemos tener una almohada durante años y años y años? No. O, al menos, no deberíamos. Hoy te contamos cada cuánto tiempo hay que cambiar la almohada para que tu descanso y tu salud no se resientan.
Cada cuánto tiempo hay que cambiar la almohada: esto dicen los expertos
No existe una respuesta única a la pregunta de cada cuánto tiempo hay que cambiar la almohada. Sin embargo, si nos pedís un primer dato, así a modo genérico, se puede establecer este período en dos años.
Entrando un poco más en materia y ahondando en el tema, lo cierto es que, además de la calidad de la almohada que elijamos, entra en juego el material que usemos. Una buena almohada de pluma la podríamos tener hasta cinco años (siempre que la lavemos un par de veces al año), sin embargo, el tiempo se recorta bastante con las almohadas de latex y viscoelástica, que nos pueden aguantar hasta tres años. En el caso de las almohadas de fibra sintética se recomienda cambiarlas cada año.
¿Por qué hay que cambiar la almohada?
Hay dos razones principales por las que este cambio se hace necesario. Por una parte, el tema de la higiene. Aunque las usemos con funda, muchas almohadas no se puede lavar, por lo que al final es algo que usamos a diario, en contacto con el pelo, sudor, etc., y pueden acumular bacterias que no son nada saludables.
Además, también con el tiempo se deforman, pierden comodidad y puede llegar a ocasionarnos dolor de hombro, de cervicales, de espalda… Si quieres cuidar tu salud, cambia tu almohada en los plazos indicados o cuando notes que ya no te resulta tan cómoda como el primer día.