¿Se pueden estropear los medicamentos con el calor? Tal vez nunca te lo hayas preguntado. O tal vez sí. Para arrojar algo de luz al asunto, te contamos cómo conservar y proteger los medicamentos del calor, para evitar que se estropeen y tenga consecuencias para tu salud. Sigue estos consejos y recomendaciones.
Cómo proteger los medicamentos del calor: ¿en qué nos tenemos que fijar?
Antes de nada, tenemos que aclarar algo: a algunos medicamentos les afecta más el calor que a otros. Y debes fijarte en lo que indique la caja. Verás que suele venir la temperatura a la que se deben conservar y este es el dato clave.
Normalmente, se dividen en dos grupos. Deberás proteger los medicamentos del calor especialmente cuando en el envoltorio marque que se debe conservar entre 2ºC y 8ºC. En este caso, siempre, sea verano o invierno, debes conservarlos en la nevera y vigilar que lo tengas configurado en este rango de temperaturas. Además, son también más susceptibles al calor ciertos envases, como los supositorios, insulina, cremas y óvulos vaginales. Esta forma de presentación es mucho más delicada que las pastillas o sobres.
En el caso de medicamentos que se deben conservar a menos de 30ºC no suele presentar problemas incluso en los días más altos, ya que rara vez en un interior de una vivienda se alcanzan más de 40ºC, que es, en la práctica, el calor que pueden llegar a aguantar. En cualquier caso, busca siempre conservarlos en un lugar fresco, seco y sin iluminación. Poner los medicamentos directamente al sol también podría estropear sus cualidades.
Si notas que un medicamento ha cambiado su aspecto habitual (un supositorio que se ha derretido, una crema mucho más líquido, una pastilla más arenosa o no uniforme…) es preferible que los deseches y no te los tomes. Recuerda que el mejor lugar para tirar los medicamentos es en las farmacias, donde tienen obligación para recogértelos.
Y hablando de medicinas, aquí te contamos qué es SigueMed y cómo te ayudará a no olvidar tus pastillas.
Vía | OCU