En otras ocasiones hemos hablado de la limpieza de los electrodomésticos y la importancia que tiene que los mantengamos en buen estado y alarguemos su vida útil. Hoy desde GizHogar os traemos unos consejos para limpiar el robot de cocina de la mejor manera y eliminar todos los residuos que puedan permanecer en él después de cocinar, al igual que hicimos con la limpieza de la batidora.
Para mantener nuestro procesador de alimentos como el primer día, es importante que protejamos el motor del contacto con el agua antes de realizar la limpieza y también que tengamos mucha precaución cuando limpiemos las cuchillas del procesador.
¿Qué productos utilizamos para limpiar el robot de cocina?
Agua y jabón, el remedio casero multiusos
Puede parecer una evidencia, pero empapar un trapo en agua con jabón para limpiar el robot por fuera es la mejor manera de dejarlo brillante y quitar la suciedad. De la misma manera, si pasamos una esponja mojada con agua y jabón por dentro, lograremos quitar la grasa y los residuos de alimentos que se han cocinado. Recuerda anticiparte a los problemas y protege bien el motor y las conexiones eléctricas del electrodoméstico.
Antes de realizar la limpieza, lo primero es dejar que se enfríe por completo y que, por supuesto, lo desenchufemos de la corriente eléctrica. A continuación lo desmontamos siguiendo las instrucciones del fabricante para asegurarnos de no dañar ninguna pieza y que después todo funciona de manera correcta. Uno de los trucos es hacer una foto de cada pieza en su sitio para que después podamos colocarlas igual.
Cuando hayamos desmontado todas las piezas, lo mejor es meterlas en un recipiente con agua y jabón para eliminar la grasa por completo. Si contamos con lavavajillas, las piezas de cristal las podemos limpiar en él. Si la grasa aún persiste cuando saquemos las piezas del recipiente con agua y jabón, podemos aplicarles vinagre con un pulverizador y dejarlo actuar durante unos minutos para después secarlas.
Después, tenemos que secar muy bien todas las piezas con papel absorbente antes de montarlas en su sitio para que vuelva a funcionar todo otra vez. Si has hecho una foto de cómo estaban colocadas las piezas, solo tienes que fijarte. Si no, sigue los pasos del fabricante para no equivocarte de lugar. Cuando acabes, ya podrás volver a utilizar el robot de cocina para preparar todas tus recetas.