Octubre ha llegado revuelto. Una de las (malas) noticias con las que hemos recibido el mes ha sido la subida del IVA de los alimentos básicos. Una anunciada novedad que no por saberlo nos afecta menos… Y es que, aunque este incremento es contenido, a la hora de calcular la cesta de la compra anual sí que puede suponer un importante palo para las familias más vulnerables.
Hoy te quiero contar cómo se aplicará esta subida del IVA de los alimentos básicos y qué puedes hacer para lograr ahorrar en la cesta de la compra, algo que en este momento parece casi imposible porque, tú también lo habrás notado, está todo disparado.
Estos son los alimentos en los que sube el IVA (y su porcentaje)
Antes de entrar en materia, lo primero que hay que mencionar es cuáles son los alimentos que van a aumentar su precio debido al IVA. No todos subirán igual, por lo que es necesario diferenciar en dos categorías:
- Los alimentos básicos con IVA superreducido pasan del 0% al 2%
- Otros alimentos “básicos” con IVA reducido pasan del 5% al 7,5%
Entre los alimentos básicos encontramos el aceite de oliva, el pan, las harinas, las frutas, las verduras, la leche, los huevos, los tubérculos, las legumbres y los cereales. En la segunda categoría se incluyen la pasta, la carne, el pescado y los aceites de semillas (como el de girasol).
Los alimentos no considerados básicos, como refrescos, alcohol, bebidas azucaradas, etc., continúan con el 21% de IVA. Por cierto, los restaurantes tienen un 10% de IVA para el consumidor, algo que no se ha modificado y que, en principio, continuará igual.
Ojo, porque hay truco: habrá otra subida
La cosa no queda aquí. Y es donde empieza lo preocupante. Y es que esta subida solo es el primer paso, la primera etapa para la última subida que se espera. A partir del 1 de enero de 2025, el IVA superreducida pasará al 4%, el IVA reducido pasará al 10% y el IVA general se mantendrá en el 21%. Es decir, habrá otro incremento del 2% en el primer caso y del 2,5% en el segundo. Si lo compramos con los precios de septiembre 2024, vemos que en solo tres meses habremos subido entre un 4% y un 5% en los alimentos más básicos de nuestra cesta.
Se trata de una subida más que considerable teniendo en cuenta que comer no es un lujo (o al menos no debería serlo) y que son precisamente los alimentos más saludables e imprescindibles en la vida de una persona los que se van a encarecer debido a esta medida.
Pero, ¿por qué viene una subida del IVA de los alimentos ahora?
Desde el 1 de enero de 2023 se viene aplicando una reducción en el IVA debido a la inflación de precios. Una medida anticrisis muy popular, que ahora dice adiós ya que, según consideran “los que mandan”, ya no es necesaria. Permíteme que dude.
Los alimentos están cada vez más caros, aunque la inflación “dicen” que ya no se encuentra en máximos, si comparamos los precios de hace un par de años con los que tenemos ahora, la cesta de la compra cada vez es más cara. Según apuntan desde OCU, el precio de los alimentos ha experimentado una subida de 35,5% en tres años, por lo que parece evidente que todavía es demasiado pronto para retirar esta ayuda sobre el tipo impositivo. También, según cálculos de la OCU, esta subida del IVA de los alimentos, a partir de enero de 2025, se estimará en unos seis euros al mes.
Ante esta subida del IVA de los alimentos, ¿se puede hacer algo para ahorrar?
Hay algo que no voy a negociar: una buena alimentación. Y no se trata de ir a comer cada semana a los mejores restaurantes de la ciudad, ni mucho menos. Eso sí que se puede considerar un lujo (aunque no debería). Me refiero a consumir alimentos de calidad en casa, ya que eso está estrechamente relacionado con nuestra salud. Frutas, verduras, tubérculos, carnes, pescados, legumbres… Esta debe ser nuestra base de nuestra alimentación, para toda la familia.
No podemos hacer nada para evitar la subida del IVA de los alimentos, evidentemente no es algo que esté en nuestras manos, pero quiero darte algunos tips para ahorrar en la cesta de la compra. O al menos intentarlo.
El primero de todos, es comparar precios. Precisamente hace unos días te conté cuáles son los supermercados más baratos en 2024. Con esto, podrás arañar algunos eurillos en tu cesta de la compra. No basta con que compares los supermercados, también debes comparar el precio de los productos que tú compres, porque hay algunos que son más caros en ciertas cadenas que en otras.
Los alimentos de marca blanca son también muy buena opción. Cada vez son más numerosos, con mejor calidad y mejor sabor. Prueba diferentes marcas blancas para encontrar aquellos que mejor se adapten a tu menú. Además, los productos de temporada son una buena opción para encontrar mejores precios. Por ejemplo, una buena muestra la tenemos en las frutas. Intenta comprar fresas en invierno y verás que subida de precio… Sin embargo, a finales de primavera es cuando mejor están y más baratas son. Aplícalo a todo y verás como saldrás ganando. Y se nota.
En cuanto a carnes y pescados, los productos congelados son más económicos que los frescos. Ojo, no hablo de precocinados (son más caros y menos saludables). Es cierto que lo ideal serían los frescos, pero los congelados tampoco están nada mal y son sustancialmente más económicos. Además, permiten darnos un plan B, ya que tener pescado o carne congelado nos da bastante juego a la hora de hacer nuestras comidas o cenas.
Una buena planificación es básica y, parece mentira, pero también sirve para ahorrar. Prepara los menús de la semana con anticipación y así evitarás comprar de más, que te caduquen los alimentos y, en definitiva, tener mejor organizada tu cesta de la compra y luchar contra el desperdicio alimentario. Que no está la cosa para tirar la comida (ni el dinero).
