El estilo ZEN es una forma de vida y decoración que tiene sus raíces en la filosofía oriental del budismo zen. Este estilo este se caracteriza por buscar la armonía, el equilibrio y priorizar el minimalismo y la simplicidad. El mismo destaca por el uso de muebles sencillos y materiales naturales, así como también de colores neutros. Además, invita a la meditación y promueve la espiritualidad, algo muy apropiado considerando que el término Zen proviene de la palabra sánscrita dhyāna, que significa “meditación”. Dejando la etimología a un lado, está comprobado que el estilo zen tiene beneficios para la salud mental, ya que ayuda a reducir el estrés y la ansiedad, así que ¿por qué no decorar nuestro hogar u oficina con dicho estilo? Con eso en mente, un cuadro zen es un buen punto de partida.
Hoy conoceremos los beneficios que tiene decorar el hogar con un cuadro zen, y si deseas explorar un gran catálogo de cuadros de este estilo, pulse aquí.
¿Qué es un cuadro Zen?
Puede que suene como una obviedad, pero un cuadro zen es una obra de arte, la cual usualmente plasma elementos o simbología relacionada con la filosofía zen. Algunos de los temas más recurrentes son: El Buda, mandalas, flores, naturaleza, animales, fuentes de agua y paisajes orientales. De igual manera, las figuras meditativas abundan en este género de pinturas, y esa es una gran parte del encanto.
Dado que el estilo zen se extiende a varios países, existen variadas interpretaciones del mismo, y esa variedad se traduce a los posibles motivos representados en cuadros zen. Dicho eso, lo que siempre tienen en común es esa vibra calmada que invita a la meditación, el autoconocimiento y la espiritualidad.
Ventajas de un cuadro zen
Las ventajas de un cuadro zen son los mismas que aporta el estilo zen como motivo de decoración para el hogar, y entre ellas podemos mencionar:
- Promueve la relajación mental y física mediante la creación de un ambiente armonioso y pacífico.
- Estimula la meditación y la reflexión mediante imágenes evocativas que invitan a la contemplación y el autoconocimiento.
- Reducen la ansiedad, el estrés y los pensamientos negativos, lo cual favorece el bienestar físico y mental.
- Invita a la creatividad y la intuición.
- Son minimalistas y poco ostentosos, normalmente las imágenes retratadas en el estilo zen evocan pureza y serenidad.
- Brindan inspiración y sabiduría, después de todo, se dice que la filosofía zen busca la experiencia de la sabiduría más allá del discurso racional.
- Es una ventana que invita a conocer más sobre la filosofía zen, la cual tiene enseñanzas muy útiles para la vida que giran en torno la iluminación espiritual, la plenitud y la tranquilidad.
Cómo elegir un cuadro basado tu personalidad
Cada persona es un mundo diferente, así que puede que nada de lo dicho a continuación aplique a ti, pero si nos permites hacer algunas recomendaciones, diríamos lo siguiente:
- Si buscas inspiración y sabiduría, los cuadros de budas son para ti, después de todo, se trata del maestro del Zen.
- Si prefieres la serenidad y relajación, puede que te gusten más los cuadros de paisajes naturales.
- Los amantes del minimalismo y la simplicidad encontrarán confort en los cuadros de piedras y fuentes de agua.
- Los cuadros de flores y animales son ideales para los que buscan energía y vitalidad.
- Si buscas un cuadro que exprese armonía y equilibrio, entonces los cuadros de mandalas son para ti, pues estos representan el orden cósmico y la unidad.
Cambiando totalmente de tema, otro tipo de decoración que nos encanta además del ZEN es el estilo aesthetic, y nada nos detiene de combinarlos.